Los desesperados planes del Comando Sur
Las acciones perpetradas desde el 21 de marzo de este año por grupos irregulares provenientes de Colombia en La Victoria, territorio venezolano fronterizo con el hermano país, no fueron improvisadas. Forman parte del Plan “B” del Comando Sur para desestabilizar nuestra Nación y derrocar la Revolución Bolivariana.
En febrero de 2016, el Jefe del Comando Sur, Kurt Tidd, en un documento titulado Operación Venezuela Freedom-2, escribió: “Es indispensable destacar que la responsabilidad en la elaboración, planeación y ejecución parcial de la Operación Venezuela Freedom-2 en los actuales momentos descansa en nuestro Comando … Bajo un enfoque de ´cerco y asfixia´ hemos acordado con los socios más cercanos de la MUD (partido político de oposición) utilizar la Asamblea Nacional como tenaza para obstruir la gobernanza: convocar eventos y movilizaciones, interpelar a los gobernantes, negar créditos, derogar leyes”.
Para ese momento, 2016, el Plan “A” lo ejecutarían los diputados de la MUD desde la Asamblea Nacional. No obstante, tenían también un Plan “B”. Como dijo Donald Trump “Todas las opciones están sobre la mesa”. Se lee en el mismo documento: “Si bien en este terreno de la situación militar no podemos actuar ahora abiertamente, con las fuerzas especiales hay que concretar lo ya anteriormente planificado para la fase 2 (tenaza) de la Operación. Los entrenamientos y aprestos operacionales de los últimos meses con la Fuerza de Tarea Conjunta-Bravo en la base de Palmerola, Honduras, y la Fuerza de Tarea Conjunta Inter agencial Sur (JIATFS) permiten colocar tales componentes en condiciones de actuar rápidamente en un arco geo-estratégico apoyado en las bases militares de ´control y monitoreo´ en Arauca, Larandia, Tres Esquinas, Puerto Leguizamo, Florencia y Leticia en Colombia; todo ello como lugar de Operaciones de Avanzada con proyecciones sobre la región central de Venezuela donde se concentra el poderío político-militar.”